sábado, 14 de agosto de 2010

LA TRANSPARENCIA, tiene las patas muy cortas.

¡Mariano, ... Mariano...  que canto, aviso!

La transparencia en política es un mal ejemplo, y no llega muy lejos, porque es frágil.
Haz como todos Tío oPaco... niégalo todo... total ya a estas alturas podemos creernos que hasta esto es una democracia. ¡Sigue mintiendo bobo!... y silba, tu silba que eso descoloca a los opacos.

1 comentario:

Silvia Delgado dijo...

Je, je, la transparencia tiene las patas cortas, puede ser, lo que tiene largos son los dedos, muy, muy largos. Un saludo, Silvia.